miércoles, 9 de noviembre de 2011

La Guardia Civil enseña a los más pequeños los entresijos de su trabajo

Muchas veces la ciudadanía tiene la impresión de que la labor de la Guardia Civil responde a un carácter sancionador, pero nada más lejos de la realidad. Precisamente, y consciente de esa impresión que a veces ofrece este cuerpo, pudieron ayer en marcha una impresionante exhibición de medios en el IES de Foz, con el objetivo de que los pequeños conociesen de primera mano la labor de los agentes en cuanto a prevención y seguridad ciudadana.

La actividad fue todo un éxito, como se pudo apreciar en el importante número de alumnos que acudió al acto, no solo del IES de Foz, sino de todos los colegios de la localidad y también de varios de Ribadeo, Burela y otros concellos mariñanos. El programa arrancó a las 10.00 horas con una exposición de medios y materiales de la Guardia Civil relacionados con la detección, prevención y persecución de delitos. «Gustoume moito todo o que tiñan os axentes, xa que é como nas películas. O que máis me gustou foron todos os aparellos raros que tiñan que eu nunca vira antes», señaló Irene López, una de las jóvenes presentes en la exposición.

Antes de mostrar su material y explicar su funcionamiento, varios de los más de 30 agentes presentes en la demostración ofrecieron conferencias didácticas a los alumnos. En concreto en el día de ayer trataron tres temas de actualidad y de suma importancia para los jóvenes como los riesgos de internet, las drogas y el acoso escolar. «O obxectivo é que a xente vexa que o noso labor fundamental é a prevención e a cercanía coa cidadanía», señaló Horencio Pérez, portavoz de la Comandancia de Lugo.

Sin duda uno de los momentos que mayor expectación levantó fue la exhibición realizada por perros adiestrados especialistas en detección de drogas y explosivos del servicio cinológico de la Guardia Civil. «Foi o que máis me gustou de todo porque gústanme moito os cans e estes eran moi listos e estaban moi ben adestrados», indicó la alumna focense Lucía Carballeira. También fue espectacular la destreza mostrada por los miembros del grupo de especialistas de montaña del instituto armado, que simuló un rescate en una zona elevada habilitada en el recinto educativo. Los jóvenes confesaron sentirse realmente sorprendidos por la destreza de los agentes. «Ya nos habían dicho que íbamos a una exhibición de la Guardia Civil y la verdad es que pensé que sería un poco aburrido pero fue todo lo contrario. No me imaginaba que hiciesen tantas, sobre todo porque hubo algunas que me parecieron realmente difíciles de realizar», explicó el alumno ribadense Pablo Rey.

Realmente la expectación fue máxima durante toda la jornada, donde llegó a haber unas 500 personas en el centro educativo. Además de alumnos de otros centros hubo madres que trajeron a sus hijos pequeños para que viesen a los agentes. «Eu viña coa idea de que o cativo estivese entretido, pero ó final fun eu a que máis o está a desfrutar», señaló Eugenia Quelle, madre de un niño de cuatro años.

Una de las cosas más significativas y novedosas de este acto estuvo, además de en la amable comunicación y explicación de los agentes, en la muestra de material que realizó la Guardia Civil. En total hubo representación de siete grupos diferentes: Seguridad ciudadana, agrupación de tráfico, servicio cinológico, servicio aéreos, Seprona, grupo de actividades subacuáticas y la policía judicial. Los agentes de cada uno de los mismos fueron explicando a los jóvenes el funcionamiento de los diversos aparatos que utilizan, alguno de ellos muy sorprendente. «Una de las cosas que les llamó más la atención fue el equipo de detección de incendios y también el de análisis de agua. Es normal porque son muy llamativos y raros y los pequeños preguntan por ellos», señaló uno de los agentes.

El trabajo de la policía judicial fue también muy seguido por los alumnos y gracias a sus agentes descubrieron algunos de sus métodos y técnicas que utilizan. «Parece como en CSI, teñen de todo», indicó una de las alumnas.

Vehículos
Por encima de todas las actividades y explicaciones dadas por los agentes, hubo un elemento que llamó enormemente la atención de los jóvenes, que fue el poder comprobar de primera mano el interior de los vehículos oficiales. Fueron muchos los alumnos que no se pudieron resistir a subir al coche patrulla o probar los mandos de una moto de la Guardia Civil. De hecho, las sirenas de alarma no dejaron de sonar durante gran parte del acto como consecuencia de las inquietas manos de los jóvenes, muchos de los cuales incluso piensan en formar parte de la Guardia Civil de mayores. «A min gustaríame ser axente, sobre todo no monte, porque gústame a natureza e así podía vixiar que ninguén fixera nada malo ás árbores nin os animais», señaló uno de los jóvenes.

El acto estelar del día fue el aterrizaje del helicóptero del servicio aéreo. Los pequeños pudieron acceder a la cabina, donde les explicaron cómo se efectúa una maniobra de vuelo.
Estas actividades tienen un coste importante, por eso se realizan pocas veces al año y se hacen en zonas geográficas extensas, como es la comarca, y en centros educativos. «Trátase de facer ver o cidadán o instrumental e especialidades existentes. Simplemente trátase de que se vexa que a Garda Civil está para servir e non para meter medo», señaló el portavoz de la Comandancia de Lugo Horencio Pérez.